Español
Apellido de origen patronímico, derivado del nombre propio de Ares. Uno de sus más antiguos solares estuvo situado en Galicia y eran descendientes, según la tradición, de los Reyes suevos de Galicia. Hijo del Conde Don Gutierre A. fue San Rosendo, Obispo de Santiago. Este linaje pasó después a Asturias, León, Castilla, Aragón y Andalucía, entroncando con nobles familias y dando lugar a apellidos tan esclarecidos como los de A.-Dávila (Conde de Puñonrostro), A.-Castillo, A. Montalvo, A. de Saavedra (Duques de Rivas) y otros no menos importantes. Don Tomás A. Marín y Cubas, nació en Telde el 29 de noviembre de 1643. Estudió Medicina en Salamanca, donde contrajo matrimonio con Doña Agustina Castañeda. Ejerció en Las Palmas donde falleció el 24 de febrero de 1704, siendo sepultado en la iglesia de Santo Domingo. Caballeros de este linaje probaron su nobleza en las Ordenes de Santiago, Alcántara y Carlos III y mucho de ellos en las Reales Chancillerías de Valladolid y Granada y en la Real Audiencia de Oviedo. Patronimico muy extendido por España. Una familia así apellidada radicó en la ciudad de Sangüesa (Navarra), y de ella fué Tomás de A. y Leyza, Caballero de la Orden de Carlos III, desde el 19 de Julio de 1814. Con el descubrimiento del Nuevo Mundo, muchos fueron los hombres y mujeres que cruzaron el Atlántico en busca de nuevos horizontes, y en concreto los que portando el apellido Arias, extendieron su linaje por América. Así pues, tras nuestra investigación realizada en el Archivo General de Indias, donde consta el nombre de los pasajeros que viajaron al Nuevo Mundo, encontramos que Juan Arias, natural de Plasencia, hijo de Troilo de Paz y de Isabel Arias, con su mujer María López, y sus hijos Juan, Isabel, y Francisco, partieron a Nueva